Églogas: Recogiendo el rebaño – Ilustrador: Mar Sáez

Vamos a empezar por el principio, porque por el final lo veo un poco complicado.

Tod@s conocemos las Églogas de Garcilaso, y tenemos claro que la primera de ellas cuenta el lamento de dos pastores, Salicio y Nemoroso, lo que se conoce como “poesía pastoril.” Es sorprendente como ambos pastores están sufriendo por sus amadas, pero los motivos de cada uno son muy distintos, y los veremos a continuación.

Antes de empezar con el cantar de Salicio me gustaría resaltar la capacidad de Garcilaso para hacer de narrador al inicio de la obra, y acto seguido es capaz de escribir en primera persona las historias de los personajes. Me parece algo muy complicado de hacer, a mí, personalmente, me sorprende.

Ahora sí, empezamos.

Cantar de Salicio.

Al inicio de este cantar podemos ver que se trata, en su mayoría, de reproches a su amada, Galatea. De igual manera, me resulta llamativa la utilización de la hipérbole, es un texto cargado de tanto dramatismo que se llega a nombrar a Dios, y a mí, como lectora, ese ruego al “ser supremo “ me transmite la tristeza y desesperación de  Salicio;

"¡Oh Dios!, ¿por qué siquiera,
 pues ves desde tu altura
 esta falsa perjura
causar la muerte d’un estrecho amigo,
no recibe del cielo algún castigo? "

En relación con esto, resulta interesante la repetición del último verso. Esto le da una agradable musicalidad a la égloga;

"Salid sin duelo, lágrimas, corriendo."

El autor introduce de forma sutil la mitología;

 "¡Cuántas veces, durmiendo en la floresta,
reputándolo yo por desvarío,
vi mi mal entre sueños, desdichado!
Soñaba que en el tiempo del estío
llevaba (por pasar allí la siesta)
a abrevar en el Tajo mi ganado;
 y después de llegado,
 sin saber de cuál arte,
 por desusada parte
y por nuevo camino el agua s’iba;
ardiendo yo con la calor estiva,
el curso enajenado iba siguiendo
 del agua fugitiva."

Se trata del famoso mito de Morfeo, dios de los sueños y las pesadillas; cuando Ceice, rey de Traquis, se ahogó, su esposa, Alcíone, se enteró por un sueño transmitido por Morfeo. Desesperada de dolor se lanzó al mar buscando a su amado, pero solo encontró la muerte. Finalmente, Morfeo fue asesinado por Zeus, como consecuencia por haber revelado secretos de los inmortales a los humanos. 

Salicio utiliza esto para explicar que veía su mal en sus sueños. El agua del Tajo, para mí, representa la ausencia de su amada.

A continuación, me gustaría destacar los siguientes versos;

"viendo mi amada hiedra
de mí arrancada, en otro muro asida,
y mi parra en otro olmo entretejida..."

Me parece fascinante la forma en la que se utilizan unas simples plantas para describir un sufrimiento tan severo, para mí la hiedra y la parra representan a Galatea, y el Olmo a su nuevo amor. También me gusta el efecto que crea el verbo “arrancar”, pienso que transmite mucha fuerza a la hora de leer la estrofa.

Vamos a continuar hablando de la antítesis;

"La cordera paciente
 con el lobo hambriento
 hará su ajuntamiento..."

No se tú, pero yo leyendo esto desde mi escritorio puedo sentir el resentimiento de Salicio. Referirse al nuevo amado de Galatea como “lobo hambriento” no suena muy amigable.

La anáfora presente es otra forma de exageración o lamentación, además se trata de preguntas retóricas, lo que hace que aumente la tensión del lector;

"¿Cómo te vine en tanto menosprecio?
¿Cómo te fui tan presto aborrecible?
¿Cómo te faltó en mí el conocimiento?"

En la última estrofa se muestran más referencias a la mitología. Se trata del mito de Piérides; nueve doncellas que se dedicaban al canto se enfrentaron a las Musas. Como consecuencia de esto, tras perder la competición, las doncellas fueron transformadas en aves;

"Lo que cantó tras esto Nemoroso,
decidlo vos, Pïérides, que tanto
 no puedo yo ni oso,
que siento enflaquecer mi débil canto." 

De esta forma, el narrador da paso al cantar de Nemoroso.

Cantar de Nemoroso.

En el caso de Nemoroso vemos que inicia el cantar empleando el tópico “Locus amoenus”, idealizando la naturaleza y recordando los momentos que vivió allí con Elisa, su amada;

"Corrientes aguas puras, cristalinas,
árboles que os estáis mirando en ellas,
verde prado de fresca sombra lleno,
aves que aquí sembráis vuestras querellas,
hiedra que por los árboles caminas,
torciendo el paso por su verde seno..."

A medida que avanza, nos damos cuenta de que todo ese entorno perfecto ya no existe, y es aquí cuando reflexiona sobre Elisa, pues ha fallecido a una temprana edad, es por esto que el tópico más utilizado es el “Ubi Sunt“;

"¿Dó están agora aquellos claros ojos
que llevaban tras sí, como colgada,
mi alma, doquier que ellos se volvían?
¿Dó está la blanca mano delicada,
llena de vencimientos y despojos,
que de mí mis sentidos l’ofrecían?
 Los cabellos que vían
 con gran desprecio al oro
 como a menor tesoro
¿adónde están, adónde el blanco pecho?
¿Dó la columna qu’el dorado techo
con proporción graciosa sostenía?"

Quiero destacar la siguiente estrofa, ya que, al leerla, se me hizo un nudo en el pecho;

"El cielo en mis dolores
 cargó la mano tanto,
 que a sempiterno llanto
y a triste soledad me ha condenado;
y lo que siento más es verme atado
a la pesada vida y enojosa,
 solo, desamparado,
ciego, sin lumbre en cárcel tenebrosa."
 

Me impactó porque la muerte (o mejor dicho, el duelo) es un tema tabú hoy en día,  por eso, leer a poetas como Garcilaso, que lo expresan de una forma tan directa, es como un “golpe de realidad.” Estuve reflexionando sobre este tema varios días y no he sido capaz de sacar una conclusión. ¿Por qué se lamentaría Nemoroso de la muerte de Elisa? ¿A caso es él el que ha dejado de vivir? ¿Y no cabe la posibilidad de que realmente no se lamente de la muerte de su amada, sino de su propia soledad, siendo una muestra más del egoísmo del ser humano? ¿Por qué tendríamos que tener miedo de algo que nunca hemos visto? O como diría Epicuro, ¿por qué tendríamos que tener miedo de algo que existe cuando nosotros no existimos? Pero, ¿qué pasaría si a lo que tememos es precisamente al hecho de dejar de existir? No sé, lo dejo a tu criterio, ya te avisé de que en este blog nos rayamos.

Por último, hablaremos muy brevemente la Teoría de las Siete esferas de Ptolomeo, porque precisamente astrónoma no soy. Nemoroso nombra “la tercera rueda”, haciendo referencia a esta teoría. La esfera número tres corresponde a Venus, por lo que, en este contexto, se refiere al amor, a reencontrarse con Elisa una vez que este fallezca, para crear una nueva vida juntos, una vida, por supuesto, idílica. Esto lo asocio al mito de Orfeo y Eurídice, que demuestra que el amor está, incluso, después de la muerte.

"¿por qué de mí te olvidas y no pides
que se apresure el tiempo en que este velo
rompa del cuerpo y verme libre pueda,
 y en la tercera rueda,
 contigo mano a mano,
 busquemos otro llano,
busquemos otros montes y otros ríos,
otros valles floridos y sombríos..."

Nos ha quedado más que claro que no hay un único motivo para sufrir por amor; Salicio por una ruptura, Nemoroso por el fallecimiento de su amada, pero ambos igual de destrozados. El aprendizaje que me ha dejado la Égloga I ha sido que todo sufrimiento es válido, no importan los motivos, importa lo que sientes, que lo que para alguien puede ser muy doloroso para mí no lo es, que tenemos que dejar de ignorar los sentimientos de los demás, que no podemos pretender que nos duelan las mismas cosas.

Empecemos a ser humanos, empecemos a sentir, y sobre todo, empecemos a aceptar que está bien no estar bien.

Bibliografía:

https://mitosyleyendascr.com/mitologia-griega/morfeo/

https://lamenteesmaravillosa.com/orfeo-y-euridice-un-mito-de-amor/

https://www.elnacional.com/opinion/el-reto-de-las-pierides-relatos-de-la-vanidad-vencida/

https://proyectoeducere.wordpress.com/2014/05/24/eglogas-de-garcilaso-de-la-vega/

Ilustración: Recogiendo el rebaño, Mar Sáez

2 thoughts on “Égloga I. Garcilaso de la Vega.

  1. Marcos says:

    Parece que eres tu el mismísimo Garcilaso, comentando su propia obra. Muy buen dominio del tema, del enfoque de los personajes y de sus intenciones. Me gusta porque conjuga el rigor literario de la obra con toques personales divertidos y desenfadados. Muy bien trabajado y comentado. Bravo¡¡¡

    1. ray-arte says:

      ese era el objetivo, gracias🥰

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